El balcón de la casa I
Jericó, Antioquia. 24.03.2019. Revisitado: 24.03.2021 I. La primera casa en la que viví estaba a la entrada de Campamento, Antioquia. La recuerdo pequeña, con el piso en grabados y de colores, con una entrada normal y cortinas feas, no sé quién las mandó a hacer, si mi papá o mi mamá, pero eran exageradas: en tonos verdes y con unas figuras alargadas. Al lado de la puerta, a mano derecha, estaba la primera habitación; y a mano izquierda, la sala, en la que yo guardaba mi triciclo, una sillita de mimbre y en la que siempre se veían regados por el piso juguetes y partes de muñecas. Allí estaban también el televisor y algunas plantas de mi madre. Al lado, estaba mi habitación, y frente a mi habitación, la de mi hermana. Pero no me interesaban mucho esos lugares de la casa, porque mi favorito estaba más atrás, al otro lado, justo junto a la cocina, allí, en el balcón trasero, sucedía toda la magia que le faltaba al resto de la casa. El balcón del patio estaba ubicado al otro lado de la